Cuentos para contar.

domingo, 20 de marzo de 2016

Imagilandia

Se formó un gran tumulto en el parque. Pedro lo encontró entre los árboles, cerca del estanque, y llamó a los demás.
- ¡Mirar que animal tan extraño!
- ¡Nunca había visto nada igual! - dijo María.
Decidieron cuidarlo y hacerse cargo de él.
- Le daremos queso para comer - dijo Luis - tiene cabeza de ratón.
- No, cacahuetes .- dijo Nerea - Las orejas son de elefante.
- Si tiene cuello de jirafa - dijo Ana -  le daremos hojas.
- ¿Y si le damos semillas?, la cola es de pavo real -  dijo Antón.
- Hay que darle insectos, ¿No véis sus alas de murciélago - dijo Mauricio.
- Comerá roedores, su cuerpo es de serpiente. - dijo Elena.
- ¡Pero hombre!, ¡si es un cienpiés!, ¿no véis sus patas? - dijo Ernesto.
- ¡Que no!, comerá carne, con esa melena de león que tiene - dijo Rubén.
Mientras discutían, el animal bajó la cabeza y se puso a comer hierba.

Hagámosle una casa para que duerma - dijo Pedro.
- Será un nido, es un pájaro - dijo Antón.
- No, una madriguera, es un ratón. - dijo Luis.
-Estará mejor en una cueva - dijo Mauricio - para dormir colgado del techo.
- Que va, una camita de paja es lo que le gustaría - dijo Nerea.
De nuevo los niños se pusieron a discutir.
Entonces el animal se subió a un árbol, y se quedó dormido sobre unas ramas con la cabeza metida entre las alas.

Al día siguiente, los niños fueron de nuevo a donde se encontraba el animal, y allí estaba, entre los árboles.
- Le llamaremos "Larguito", por su cuerpo alargado - dijo María.
- Porqué no "Leónidas", con esa melena de León..........
- O Dumbo, menudas orejas tiene - dijo Nerea.
- Mejor "Draco", el vampiro - dijo Mauricio.
- Yo le llamaría "Mikie", por su cabeza de ratón, o "Minnie" si es chica - Dijo Luis.
- ¿Y "Pavarotti? - tiene cola de pavo real, y seguro que canta muy bien - dijo Antón.
Y se puso a cantar: ¡Guaki, guaki, guaki!
Y le llamaron "Guaki"

Jugaron durante todo el día con "Guaki", persiguiéndose y revolcándose en la tierra, y se hicieron grandes amigos.
Un día, que jugaban al escondite, "Guaki" cogió a Pedro con la boca, y lo posó suavemente en su lomo. Hizo lo mismo con María, Luis, Antón, Nerea, Mauricio, Elena, Ernesto, y Rubén, y desplegando su enormes alas de murciélago, ¡Echó a volar! Hizo varias cabriolas, para regocijo de los niños, y se lanzó en picado hasta la luna. Se metía por un cráter, y salía por otro, como cosiéndola con su vuelo. Luego en Saturno, se deslizaron por su anillo, mientras el planeta hacía hula hoop con él. Bebieron zumo de tomate en Marte, que por algo es el planeta rojo, y nadando entre leche, surcaron la vía láctea hasta más allá del infinito. Llegaron a un planeta con forma de diamante que giraba emitiendo destellos de colores al espacio. Y lo que allí vieron, si que se lo podían imaginar, ya que eran niños, aunque nunca creyeron que podría ser real. Y entre nubes de algodón de azúcar, planearon sobre ciudades de plastilina y mares de espuma hasta los bosques de gelatina donde vivía "Guaki" ¡Qué decir del "gatoaraña", "el dragonmosca", o la "vacaracol", todos les recibieron cantando y bailando a ritmo de rock, y la fiesta no terminaba nunca, ya que los minutos rebotaban una y otra vez en las camas elásticas, sin querer terminar.......
Pero se hizo tarde  era la hora de cenar, y los padres de los niños podían preocuparse por ellos. Así que"Guaki" les enseñó un atajo que les llevaba directamente hasta debajo de la cama de la habitación de cada niño, prometiéndoles que al día siguiente jugarían a piratas y tesoros.
Así que padres, si no encontráis a vuestros hijos, mirar debajo de la cama, ¡puede que os llevéis una gran sorpresa!